Que hacer si despiertas en el futuro parte I: Iconoclasta

Ese desagradable sonido otra vez, el sonido de todas las mañanas, ese condenado aparato despertador, me indicaba el comienzo de un nuevo día, otro día mas desperdiciándose en esta vida, la aflicción de pensar de que había dejado un sueño a un lado solo por verse poco rentable, optando por estudiar algo de lo que estudia el montón, para asegurarse un buen futuro, haciendo lo posible por encajar en aquel molde que la sociedad me construyo.
Sin embargo ahí esta, sobre mi escritorio, aquel manuscrito, aquel sueño postergado, donde e depositado todo mi ser, mi conocimiento e inspiración, no es fácil ser escritor en estos días, ni mucho menos decidir serlo, al salir de aquel cuarto a continuar mis estudios, y mi vida solo cuento los segundos para poder volver a estar solo, no es que desprecie la compañía, es solo que ahí con mis escritos es cuando me siento más vivo, solo cuando creo grandes y bastos mundos llenos de personas , situaciones y paisajes siento que realmente existo, pero la vida no era solo escribir y el día de hoy no era una excepción, pasan las horas como si fueran eternas, separándome de mi hogar, mi pequeño departamento solitario, pero aquí estoy por fin, dispuesto a solo escribir y posteriormente dormir.
Y así lentamente abro mis ojos, este es un día nuevo, pero me extraña el no escuchar el detestable aparatejo despertador, también me extraña el no despertar somnoliento como todas las mañanas a causa de largas horas de constante dedicación a la escritura, lentamente me voy percatando del ambiente que me rodea, el ambiente en mi cuarto había cambiado un tanto, aquel cuarto de tres por cuatro ahora se veía bastante más espacioso y no eran exactamente mis muebles lo que veía, la habitación parecía haber cuadriplicado el tamaño que solía tener y al cual estaba tan acostumbrado y todo era de un color blanco opaco, la habitación tampoco parecía tener ninguna esquina, de ser un cuadrado compuesto por unas cuatro paredes un piso y un techo paso a no tener ninguna de las anteriores, solo un cuarto esférico con una plataforma que parecía mantenerme a mí, a la extraña cama de forma ovalada sobre la cual mi cuerpo estaba recostado y a una especie de torre de una altura similar a la mía que estaba a mi lado, a lo que en el fondo de aquella habitación veo que una especie de puerta se abre, por ella ingresa una criatura extraña, su piel era extremadamente pálida y destacaba en su rostro la carencia de orificios nasales, sus ojos se veían absolutamente negros y su tamaño era de más de dos metros, mi primera impresión fue obvia. Había sido abducido por un platillo volador.
La criatura una vez dentro del cuarto camino por los alrededores hablando en un dialecto que no entendía, miro en mi dirección y a mi alrededor pareciendo ser incapaz de detectarme, entonces puso sus manos sobre sus ojos y se sacó la extraña cobertura negra que había en ellos, revelando unos ojos humanos de un cálido color café, entonces la criatura comenzó a hablarme, yo no sabía que hacer y opte por responderle en mi idioma, la criatura entonces me miro y se acercó a la extraña torre a mi lado, puso la mano frente a ella por unos segundos, esta le respondió con un leve resplandor color índigo, y posteriormente dijo en voz alta – Bienvenido a nuestro tiempo, ¿eres Güinea Alimari? – lo mire sorprendido luego solo le respondí la verdad, ese no era mi nombre, pero ese era el nombre que pertenecía a mi mejor amigo y fue una grata sorpresa que
me preguntara si en efecto yo era él, entonces la criatura me preguntó mi nombre el cual dije sin dudar “Lior Levault”, me miro extrañado entonces dijo – Algo salió mal, se supone que debíamos revivir al genio Guinea Alimari – lo mire extrañado, en mis tiempos Güinea no sabía hacer nada digno de mención, por lo cual no pude evitar preguntarle a la criatura la cual estaba frente a la torre otra vez con su mano casi tocando la superficie de esta y está brillando en respuesta – ¿Y qué fue lo que hizo Guinea para ser declarado un genio? – la criatura me miro anonadado al oír mi pregunta – ¿Pero tú no eres de su época?, deberías saberlo, pero lo que me intriga es porque no has preguntado por lo que soy primero, el resto de los seres humanos que trajimos a la vida no paraban de hacer preguntas de ese tipo – entonces me pregunte lo mismo que el me preguntaba, por qué si todo parecía ser tan extraño y carecer de explicación yo aún no reaccionaba de acorde al caso, es más, como si todo lo que estuviese pasando fuera de lo más normal, sin extender más mi razonamiento le hice las preguntas pertinentes y sus respuestas, bastante cortas, fueron bastante reveladoras.
Me encontraba en el futuro, el lugar geográfico no se me podía informar al igual que el año exacto, la criatura con la cual platicaba era un ser humano, su extraña apariencia se debía a un extraño proceso evolutivo en el cual los seres humanos dejaron de respirar aire, y esta fue la parte que encontré más impresionante del relato, la inteligencia humana después de abordar cientos de inventos y avances tecnológicos se percató que las maquinas que se podrían fabricar estaban llenas de limites los cuales solo se iban ampliando con el tiempo pero seguían estando allí, sin embargo lo que respecta a la humanidad en sí, cada persona tenía un sinfín de posibilidades en su mente que podría ser explotado a todo su potencial, con lo que iniciaron experimentos para mejorar la especie humana, el que se decía era la creación más maravillosa de Dios, al avanzar esos estudios se descubrió que el alma, aquel nido de millares de teorías esotéricas realmente existía, y la demencia humana y el deseo por evolucionar llego a tal nivel que en cosa de años el alma fue el principal foco de estudio, con estos el aura, los shakras y sus derivados.
Por lo que podía apreciar el resultado de esos estudios era impresionante, en lugar de usar computadores las personas se usaban a sí mismas y sus cerebros para procesar información, en lugar de internet, el intercambio de datos se realizaba por una sustancia etérea que reemplazaba al aire y por la cual podían intercambiar abismales cantidades de información de un cerebro a otro estando a distancias realmente considerables, eran muy raros los equipos de procesamiento o computadores como los conocí en mi tiempo, de hecho el que estaba a un lado mío era de los pocos que existían y de por si era bastante antiguo, su mero propósito era facilitar la comunicación con los seres humanos que acababan de renacer en el futuro mientras la persona que había creado aquel sistema de resurrección estaba ausente, parecía que esa persona era bastante reconocida ya que el hombre que me hablaba de nombre Saahn le demostraba mucho respeto, le pregunte a Saahn sobre cómo fue que me revivieron a mí, si fue que desenterraron mi cadáver de mi tumba o algo así, a lo que solo me respondió que a él no le correspondía responder esas preguntas, que el solo era un encargado de seguridad del sector pero que no me preocupara la persona a la cual le debía mi nueva vida en el futuro estaba llegando al lugar, dirigiéndose a la puerta me dijo que a la persona que entrase por esa puerta le hiciera toda mis preguntas y que era
una lástima que por nacer defectuoso me tendrían que reciclar, yo lo mire extrañado me levante de mi plataforma tratando de procesar todo lo que me había dicho en los últimos minutos vi como la puerta se cerraba tras de él, al irse aquel sujeto me quede con una sensación desagradable, la misma que sentía cada vez que establecía contacto con cualquier persona, no estaba seguro si realmente había renacido o solo estaba soñando, pero si todo esto era real entonces me recrearon con todas mis falencias y virtudes, incluso mi personalidad asocial, en fin pensando en esto resignado me dirigí al borde de la plataforma que me mantenía y me percate que al acercarme a un sector de la gran superficie esférica, esta parecía volverse transparente, tras de ella vi una ciudad como jamás la había imaginado, no habían vehículos flotantes como los que se especulaba que habría en mi tiempo pero si había personas que lo hacían, realmente este mundo estaba más allá de toda mi imaginación, trate de tocar la superficie transparente pero mi mano la atravesó como si no estuviese ahí, a lo que me percato de que alguien había entrado por la puerta y una voz femenina me dice que saque mis manos de ahí y que no vuelva a hacer eso, sencillamente ya no sé lo que me espera pero creo que mi verdugo acaba de llegar.